domingo, 4 de octubre de 2009

A veces también


Natural dicen por ahí. Y en verdad así debería ser.
Si tan sólo nos piden ser felices. Ser felices y amar (un poco que sea). Pero es complicado. Y si tienes de estas mentes de suicida, a veces también es más.
Aun así parece que sigue ahí. Y aunque a veces también veamos los tulipanes negros o incluso lo sean, no se mueve... sigue ahí.
"Tanto pediste retener ese momento (...)". Ay ay ay! Ay que las cosas se van y vienen! Ay que jodo y al final siempre siempre está ahí; siempre siempre no es problema más que mio y los tulipanes al final nunca fueron negros.
Ay ay ay que son las tres de la madrugada... qué pasa? estás cansado o sólo te quieren pesar lo ojos? Y es que a veces también arden. A veces también vuelvo a ser ese loco estúpido que... que no sabe más que NADA! NA-DA!
Y aunque parece que me pierdo en el camino, pido disculpas, pero a veces también estamos cansados y más que siempre somos los que somos y a estas horas de las noches todos saben tal como Dios de quien estamos hablando.
Y es que a veces también es divagar y ahora es un poco eso. La geometría de una flor y un poco de que se yo, quizá algo de cálculo. Pues con jardinera sin jardinera, con un reino de protistas o un condado de micetes, al final las libelulas no son luciernagas, no tienen luz y a veces también son chapuletes.
Pero evitemos! EVITEMOS! Evitemos que ya estamos por llegar. Ya esta por llegar la hora Y aunque a veces también todo sube y baja... y el dindiringongo de la jocosa (osa) vida no se deja. No se deja. Se balancea y sube y baja y baja y sube.
Pero como dicen por ahí: "que la inocencia nos proteja". Y evitemos nuevamente. Si no ya estamos para eso... ?
Y ahora tomemos las cosas, agarremonos un poco (sólo un poco y sin miedo) de las manos y dejemoslo. Dejemoslo de una vez. De una vez dejemoslo. De una vez y por todas. Dejamoslo que ya nada nada nada nada nada tenemos que hacerle. No hay nada que hacerle. Y a mi poco ya que me interesa. Al menos estoy seguro que prefiero seguir tomado de las manos, que ese minutero siga girando en el reloj imaginario de mi muñeca y el tiempo siga corriendo en el reloj de la esquina de mi computador y nadie, pero nadie se me escape.
Porque al final tal vez lo más suicida sea decirte la verdad y aunque a esta hora de la vida tal vez sea lo mejor, estoy seguro y más que seguro que las cosas no se me pueden escapar y si algo tiene que irse soy yo. Sin mentir, diciendo la verdad. Corriendo, cerrando los ojos, pero con la boca sincera... Y la respuesta está en el viento.
... así seguimos y no queremos y es hora de irse y ya todo está y quizá no quiero que termine y nuevamente todo sigue y el tiempo se me escapa y los volteos de atracción. Porque al final no te suelto más! Yo no te suelto más! y los corazones pesan, algunos se atan y ya estoy hecho un manojo de manojos de nudos.
Y es que eso quiero y si no, no entiendo porque sigo en esto, y no mejor corro. Corro? Quizá ya es hora de correr. Pero por favor tomame la mano.
Ves que estás equivocado? A dónde vaas !!!?
Me late fuerte, me late despacio, pero me late, me late, me late. Es que no me late quiza si y quizá a veces ahora y no sé cuando. Pero no importa, no importa y al final no importa. Todo eso no importa, no importa cuando de verdad me doy cuenta de que estar aqui es lo correcto y si no, yo soy el equivocado, porque no tengo nada que hacer y si lo hago es porque quiero y lo voy a hacer. Que quede muy claro que lo voy a hacer. Porque quiero, porque sigo con la misma mente de suicida, pero por sobre todo porque sigo siendo el mismo martir masoquista que sólo sabe regalarle su corazón a estrujadores.
Y perdón, pero si no en el vertigo de la eternidad; en lo identico de la soledad.. y a veces también ahí mismo porque si y porque estoy yo, va ser y es mi culpa, yo me estrjo, yo juego a ser el limón que se cayó del árbol. El limón que espera en el pasto, en el cesped, rodeado de verde.. pero esperando. Con los miedos...
Si! Esos miedos, los mismos y los tuyos que son mios y ahahahah!, que a veces me canso, que a veces también exagero; que a veces son mis lágrimas, que a veces quieren ser mis lagrimones, pero al final siempre son mis pechos, mis pechos que se quedan ahí, ahí mismo. Ahí en mi pecho... con esa esfera que no gira más.
Eso no cambio. Eso no cambio. Eso no cambio. Y ahora (nuevamente) sólo quiero ser un poco menos pavo, que se (des)acelere tal vez un poco el bang y en el big tan sólo me encuentre contigo, contigo contigo contigo... y pueda cobrar o desconbrar ese sentido.
Y las cosas ya no son, ya son y al final no quiero nada, me amargo un poco, me (des)pinto los labios y el carmesi de tus ojeras sólo cobra sentido en mi (des)esperazado de...
gfvlplllllllllllllbbm,gffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffff.... .. . ... .. . . . . . .

(ya no se que pensar, ya no más.)

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