jueves, 10 de junio de 2010

Madeja-de-lana.

Es vertiginoso. Sin duda. Claro que lo es. Es vertiginoso, mucho muy... y claro, lo sé, es peligroso, pero qué quieren que le haga, no puedo evitarlo, simplemente así es. Ya me metí en las patas de los caballos y vaya que si pueden galopar o cualquierade esas cosas que los caballos hagan con sus patas y peligre mi humanidad bajo ellas.
Pero no sé.. Recién estaba descanzando, recostado, con los ojos cerrados.. recién estaba pensando o más que seguro que no lo estaba haciendo, pero no sé..
Oj-alá pudiera alguien darme la seguiridad que yo no tengo, porque claro que hay vertigo, pero vamos que le tengo miedo a las alturas y nadie quiere hacerme creer que en verdad no estoy tan por los aires.
Ya no séee, en serio, no lo sé.. No sé, ni sé nada.
En verdad, sencillamente es un poco que no puedo evitarlo, que no puedo evitarlo y que los enanitos aun no se van pa'l monte y esto de tener razón racional sólo hace que los astros se confabulen y como siempre mi cabeza y todo termine siendo un nudo, de esos que nadie se atreve a desatar, pero que todos quieren ver como se las arregla.
----

2 comentarios:

  1. Mi abuelita decía, mientras tejes con crochet y se hace uno de esos nudos descritos por usté... hay que detenerse y soplarlos. La perspectiva y el aire hace que los nudos se desaten.

    Te quiero te quiero y te vuelvo a querer =)

    ResponderBorrar
  2. gracias, me encantó el consejo de tu abuelita <3

    ResponderBorrar