lunes, 8 de junio de 2009

mientras debería hacer un ensayo para la u, me ven aquí escribiendo.

Alguien podría enseñarme hasta donde deben llegar las cosas?
En verda me pregunto cómo es que realmente se que lo que hago está bien...
Ya estamos a junio y llevó más de una semana, más de diez días y si siguiera sin escribir esto ahora, podría ser más aun.
Y aun así las cosas siguen marchando. Pues la verdad es que han pasado facilmente, por decir un número grande cualquiera, trecientos veintidos mil quinientos ocho cosas en mi vida. Y mientras aquí parece que el mundo no existiera. Pero no es así. Es más, creo que han pasado más cosas de las que son normales en mi vida, si ante sconducia a 50 km/hr, ahora el acelerador se fue un poco más a fondo y ya voy por decir lo menos a 80 u 120 km/hr.
No sé. Si al final, eso no es tanto lo que importa y es tampoco por lo que escribo. He leido y me han contado hace unos días en un libro, que un escritor escribe justamente porque encuentra que las historías que cuenta tienen esa cualidad de contables y extraordinarías de las que su vida carece.
Parece entonces lógico que ahora que mi vida va con tantas cosas, quizá me calcen menos las palabras. Así quizá las letras le temen un poco a la realidad, porque saben que ellas son infinitamente pequeñas al lado de esta gigante.
No sé, no sé. La mente me da vueltas y sobretodo me pregunto como llegue a este tema si comence escriviendo cuestionando un poco la amistad y como soy y me dejo ser (en especial frente a ella).
Sabré yo mismo hace cuento que estoy siendo más cuidadoso en decir teamo. creo que ni yo mismo lo sé.
Hoy fue un día de amigos sobretodo. Y el findesemana en general.
Volví a hablarle a aquel lagrato y casi que me despedí. Me reencontre con aquella canario morena y pude al menos simplemente estar. me sorprendio aquel destello lleno de magia que eleguí para mi vida. Retumbe con los viejos gritos de ese grupo que sin ser grupo, siguen siendo perros amigos. Abrace a aquel osito polar que ahora en ese abrazo volvió en mi corazón a ser mi hermano. Cuide aquella parte que literalmente en algún momento fue de mi cuerpo y ahora en palabras aun se describe de esta forma. Recordé el viejo amor por aquel giganton que me hacía mirar la nubes y el cielo azul. Volví a ver a esa lucecilla que con sus ojos grandes parece pedirme que me quede siempre a su lado. Reí junto a la pequeña algo inquieta que más que nunca conosco en alegrías y penas. Aclaré un poco más las cosas y sin pensar y negandose a ello, parace que logré estar un poco más cerca de aquel que ya creía lejos. Encontré en ese inquieto fluir de locuras, un poco de la tranquilidad que necesito, del apoyo que espero y de la atención que requiero. Me confesaron y me confese con ese que no es ni cura, ni padre, pero que sin darme cuenta parace estar mucho más ahí de lo que jamás pense. Me sentí apoyado por aquel en que por un poco de miedo y un poco más de prejuicio tal vez, me dío miedo antes creer... bla bla bla.
AMIGOS fue para este findesema. AMIGOS y quizá ahora algunas preguntas.
Pero... mas como siempre me doy cuenta de que eso al fin no interesa y que teniendolos a ellos, sin riesgos o con ellos, siendo como soy y sin mucho que pensar, las cosas han resultado demasiado bien.
Estoy un poco feliz, pero sobretodo (siempre digo sobretodo) LOSAMO.

1 comentario:

  1. Amigo mío cada día te quiero más y, sí, me da pena no estar en santiago, pero bueno, esperó el fin de semana que se vengan a Chillán….
    Te quiero y te amo un montón
    abrazos

    ResponderBorrar