jueves, 16 de abril de 2009

Hoy fue un regalo.

Estar contigo o contigo ya de por si es tener un regalo. Que sean de esos amigos que miras a los ojos, que quieres simplemente por el hecho de que están ahí contigo. Me maravillan con su espontaneidad, con su simplemente ser, con esas risas, esas sonrisas, esas formas en que simplemente cada uno de ustedes son.
Hoy nuevamente fue un día maravilloso, lleno de ustedes. Poder estar con ustedes de frente o a mi lado, hace que mi día sea más iluminado, doy gracias a Diosito por ponerlos hoy en mi camino y poder haber disfrutado de tan esplendorosa tarde en su compañia.
Me encanta conversar y hoy con ustedes las palabras parecian salir por si solas, incluso esos silencios parecian decirme algo; queria hablarles simplemente, pude botar mucho de lo que tenía guardado y agradesco enormemente a sus oidos y a sus bocas por hacerme compañia en esta tarea de ser el uno en el otro.
Gracias porque hoy, no sólo estuve con ustedes compartiendo un espacio, sino que entregandonos el uno al otro.

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