miércoles, 21 de diciembre de 2011

Problemas.




Hace tiempo que no escribo. Creo que mis ideas están algo aguadas. O no. No es justo decir eso. La verdad es que sigo pensando e incluso hay muchas nuevas ideas que han dado vuelta por ahí. No podemos hablar de un stand-by, si en realidad mi cerebro se ha comportado más como una centrífuga de donde cada cierto rato sale disparado un nuevo pensamiento.
Pero aun así no escribo.
Podría echarle la culpa al sueño (sí, ahora tengo sueño; más bien estoy cansado y incluso mejor, agotado). Pero no es eso. Aunque los ojos pesados hacen que sea más difícil mirar la pantalla, no le impiden a los dedos echarse a correr. Hay que ser más cuidadoso y es que no hay real problema de cansancio. Y como tampoco es que no piense, no es que podamos decir que las neuronas se hayan ido a la playa y estén echadas guata al sol. El cansancio tampoco es mental.
El tema a de ir por otro lado.
Tal vez -y eso siento- estoy en una escasez de letras, algo así como una sequía de palabras o peor aun alguien a puesto sin darme cuenta una veda literaria en mi.
~
La cosa es grave. Tenemos que tomar partido. Hay que hacer algo. Porque si seguimos así -y no quiero ni pensarlo- podrían no sólo morir las letras, sino que matar al literato y ahogar el hombre que hay tras éste.

viernes, 2 de diciembre de 2011

Mal de lector

Lo malo de que te guste leer, es que te encantas muy fácil de algunos libros y de vez en mes, te llegan unas ganas locas de volver a leer por enésima vez el mismo libro, sin darte la posibilidad de descubrir uno nuevo y maravilloso.-