viernes, 27 de abril de 2012

Que llueva


Oj'alá llueva mañana. Necesito un poco de agua y quizá incluso mojarme un poco más.
Me alcanzo a imaginar un poco mirando por la ventana como cae el agua, sintiendo el ruido constante, inhalando el frío del mundo, exhalando mi tibieza personal.
Necesito que llueva.
Necesito que llueva y no tengo por que dar explicaciones de la razón del menester.

domingo, 22 de abril de 2012

F.

Familia de mi corazón, ¿quién lo diría? Esto de estar sin tiempo, de correr por todos lados, de querer parar y agarrar todas las horas que pasan a mi alrededor. Sí, todo eso y paf!, los almuerzos dominicales, las reuniones familiares se vuelven el templo del corazón. Y es que pucha que disfruto estar sencillamente compartiendo sin más con ustedes, cruzando palabras, aunque simplemente bastando con cruzar. ¿Quién lo diría? Yo, el reacio, el terco, el molesto, el egoísta, el sin-sabor, el no-me-hace-falta-nada.. lo que fuera y lo que tuviera que ser. Ese mismo, ahora corre por estar, por sencillamente estar. Ese mismo, ahora abrazo y da amor como el de siempre, pero con más amor. Qué sé shó! Sólo sé que nada sé y que de un día al otro parece que me enamoré un poco de mi familia y de poder tenerla aunque sea un segundo para mi.

domingo, 8 de abril de 2012

Ya caímos (en cuenta)

Parece que al fin me di cuenta de que comenzó el año. Al fin me di cuenta que los días de vacaciones ya han terminado. Y aunque eso nunca haya significado para mi estar guatita al sol, claro que significaba dedicar todo mi tiempo a lo que me diera en gana y vamos! que esas ganas por lo general no están para nada en el estudio, porque si es que alguna vez lo están en el aprender, y claro que es más de una vez, esa vez nunca es en aprender exactamente lo que en la universidad les da la gana que yo aprenda.

#unpocodecorrientedelaconciencia #nosequeje

sábado, 7 de abril de 2012

Vida vivida


Una de las cosas que más me gusta de la vida es que ésta marcha. Que no se detiene. Que avanza a cada instante. Que hay que vivir las tristezas y alegrías. Que por más que pesen los pies, se baje la mirada o el cielo resplandezca, la vida no da tregua. Lo que más me gusta de la vida, es que la vida hay que vivirla y aunque no lo quieras, no se te da otra opción.